Sociedad Bíblica

Antiguo Testamento
Génesis
Éxodo
Levítico
Números
Deuteronomio
Josué
Jueces
Rut
1 Samuel
2 Samuel
1 Reyes
2 Reyes
1 Crónicas
2 Crónicas
Esdras
Nehemías
Ester
Job
Salmos
Proverbios
Eclesiastés
Cantar de los Cantares
Isaías
Jeremías
Lamentaciones
Ezequiel
Daniel
Oseas
Joel
Amós
Abdías
Jonás
Miqueas
Nahúm
Habacuc
Sofonías
Hageo
Zecarías
Malaquías
Libros Deuterocanónicos
Tobit
Judit
Ester (dc)
1 Macabeos
2 Macabeos
Eclesiástico
Sabiduría
Baruc
Daniel (dc)
Nuevo Testamento
Mateo
Marcos
Lucas
Juan
Hechos
Romanos
1 Corintios
2 Corintios
Gálatas
Efesios
Filipenses
Colosenses
1 Tesalonicenses
2 Tesalonicenses
1 Timoteo
2 Timoteo
Tito
Filemón
Hebreos
Santiago
1 Pedro
2 Pedro
1 Juan
2 Juan
3 Juan
Judas
Apocalipsis


BIBLIJA.net   - La Biblia en Internet
Buscar Referencia     Buscar palabra
Pasaje:   

Menú compacto
Versiones:  DHH  DHHn  RVR95  RVR95n Elija entre todas las versiones   Acerca de las versiones Ayuda
Idioma

1 Pedro 1.1-2.12

1 Pedro :Introducción 1 2 3 4 5


Introducción (1.1-13)
Saludo
1
Pedro,a apóstolb de Jesucristo, a los que viven esparcidos fuera de su patria,c en las provincias de Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia,d a quienes Dios Padre había escogido anteriormente conforme a su propósito. Por medio del Espíritu os ha consagradoe para que le obedezcáis y seáis purificadosf con la sangre de Jesucristo.g Recibid abundancia de gracia y de paz.
Una esperanza viva
Alabemos al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que por su gran misericordia nos ha hecho nacer de nuevo por la resurrección de Jesucristo.h Esto nos da una viva esperanzai y hará que recibáis la herenciaj que Dios os tiene guardada en el cielo, la cual no se puede destruir ni manchar ni marchitar. Por la fe que tenéis en Dios, él os protege con su poder para que alcancéis la salvación que tiene preparada y que dará a conocer en los tiempos últimos.
Por esta razón estáis llenos de alegría,k aun cuando sea necesario que durante un poco de tiempo paséis por muchas pruebas. Porque vuestra fe es como el oro: su calidad debe ser probada por medio del fuego.l La fe que resiste la prueba vale mucho más que el oro, el cual se puede destruir. De manera que vuestra fe, al ser así probada, merecerá aprobación, gloria y honor cuando Jesucristo aparezca.
8-9 Vosotros amáis a Jesucristo aunque no le habéis visto.m Ahora, creyendo en él sin haberle visto, os alegráis al haber alcanzado la salvación de vuestras almas,n que es la meta de vuestra fe; y esa alegría vuestra es tan grande y gloriosa que no podéis expresarla con palabras.
10 Ya los profetas estudiaron e investigaron acerca de esta salvación, y hablaron de lo que Dios en su bondad os iba a dar.ñ 11 El Espíritu de Cristoo hacía saber de antemano a los profetas lo que Cristo había de sufrir y la gloria que vendría después;p y ellos trataban de descubrir a qué persona y a qué tiempo se refería ese Espíritu que estaba en ellos. 12 Y Dios les hizo saber que lo que anunciaban no era para bien de ellos mismos, sino para vuestro bien. Ahora pues, esto os ha sido anunciado por los mismos que os predicaron el evangelio con el poder del Espíritu Santo enviado del cielo.q ¡Estas son cosas que los propios ángeles quisieran contemplar! 13 Por eso, estad preparados y usad de vuestro buen juicio. Poned toda vuestra esperanza en lo que Dios, en su bondad, va a daros cuando Jesucristo aparezca.
1. La nueva vida en Cristo (1.14–2.10)
Llamados a una vida santa
14 Como hijos obedientes, no viváis conforme a los deseos que teníais antes de conocer a Dios.r 15 Al contrario, vivid de una manera completamente santa, porque Dios, que os llamó, es santo; 16 pues la Escritura dice: “Sed santos, porque yo soy santo.”s
17 Si llamáis “Padre”t a Dios, que juzga a cada cual según sus hechos y sin hacer diferencia entre unas personas y otras,u debéis mostrarle reverencia durante todo el tiempo que viváis en este mundo. 18 Pues Dios os ha rescatado de la vida sin sentidov que heredasteis de vuestros antepasados; y sabéis muy bien que el costo de este rescatew no se pagó con bienes corruptibles, como el oro o la plata, 19 sino con la sangre preciosa de Cristo,x ofrecido en sacrificio como un corderoy sin defecto ni mancha. 20 Cristo había sido destinado para esto desde antes de la creación del mundo, pero en estos tiempos últimos ha aparecido para vuestro bien. 21 Por medio de Cristo, vosotros creéis en Dios, el cual le resucitó y le glorificó; así, vuestra fe y vuestra esperanza están puestas en Dios.
22 Ahora, al obedecer al mensaje de la verdad, habéis purificado vuestras almasz para amar sinceramente a los hermanos. Amaos, pues, unos a otros con corazón puro y con todas vuestras fuerzas,a 23 pues habéis vuelto a nacer, y esta vez no de padres mortales, sino de la palabra de Dios, viva y permanente. 24 Porque la Escritura dice:
“Todo hombre es como hierba,
y su grandeza es como la flor de la hierba.
La hierba se seca y la flor se cae,
25 pero la palabra del Señor permanece para siempre.”b
Esta palabra es el evangelio que se os ha anunciado.
El nuevo pueblo de Dios
2
Por lo tanto, abandonad toda clase de maldad, todo engaño, hipocresía y envidia, y toda murmuración. Como niños recién nacidos, buscad con ansia la leche espirituala pura, para que por medio de ella crezcáis y tengáis salvación, si es que realmente os habéis percatado de que el Señor es bueno.b
Cristo, la piedra viva
Acercaos, pues, al Señor, la piedra viva que los hombres despreciaron, pero que para Dios es piedra escogida y de mucho valor.c De esta manera, Dios hará de vosotros, como de piedras vivas, un templo espiritual, un sacerdocio santo que por medio de Jesucristo ofrezca sacrificios espirituales, agradables a Dios.d Por eso dice la Escritura:
“Yo pongo en Sióne una piedra
que es la piedra principal,
escogida y muy valiosa;
quien confía en ellaf no quedará defraudado.”g
Para vosotros, los creyentes, esa piedra es de mucho valor; en cambio, para los que no creen se cumple lo que dice la Escritura:
“La piedra que los constructores despreciaron
se ha convertido en la piedra principal.”h
Y también esto otro:
“Una roca, una piedra en la cual tropezarán”,i
pues ellos tropiezan al no hacer caso del mensaje; tal es su destino.j
Pero vosotros sois una familia escogida,k un sacerdocio al servicio del Rey, una nación santa,l un pueblo adquirido por Dios,m destinado a anunciar las obras maravillosas de Dios,n que os llamó a salir de la oscuridad y entrar en su luz maravillosa.ñ 10 Antes, ni siquiera erais pueblo, pero ahora sois pueblo de Dios; antes Dios no os tenía compasión, pero ahora tiene compasión de vosotros.o
2. Deberes del cristiano (2.11–4.6)
El buen ejemplo
11 Queridos hermanos, os ruego, como a extranjeros de paso por este mundo,p que no deis lugar a los deseos humanos que luchan contra el alma. 12 Conducíos bien entre los que no conocen a Dios. Así ellos, aunque ahora hablen contra vosotros como si fuerais malhechores, verán el bien que hacéis y alabarán a Diosq el día en que él pida cuentas a todos.r

© 2002 Sociedades Bíblicas Unidas y Sociedad Bíblica de España




-ltima actualización del programa: 7/4/2020