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Baruc 5, 1-9

Baruc :

Introducción 1 2 3 4 5 6

5 1 ¡Jerusalén, quítate tu ropa de luto y aflicción, y vístete de gala con el esplendor eterno que Dios te da!
2 Vístete la túnica de la victoria de Dios, y ponte en la cabeza la corona de gloria del Eterno.a	5 2 a 5.1-2 Is 52.1; 61.10; Ap 21.2.
3 Dios mostrará en toda la tierra tu esplendor,
4 pues el nombre eterno que Dios te dará es: “Paz en la justicia y gloria en el servicio a Dios.”b	4 b 5.4 Is 1.26. El nuevo nombre de Jerusalén expresa la nueva realidad que Dios va a crear: la paz será el fruto de la justicia y la verdadera gloria estará fundada en los valores religiosos.
5 ¡Levántate, Jerusalén, colócate en lugar alto, mira hacia el oriente, y verás cómo vienen tus hijos de oriente y occidente, reunidos por orden del Dios santo, alegres al ver que Dios se acordó de ellos!c	5 c 5.5 Cf. Is 43.5; 60.4; Bar 4.37.
6 Cuando se alejaron de ti, iban a pie, llevados por sus enemigos; pero Dios te los traerá gloriosamente, como reyes en su trono.d	6 d 5.6 Cf. Is 49.22; 60.4; 66.20.
7 Dios ha ordenado que se allanen los altos montes y las colinas eternas, que las cañadas se rellenen y la tierra quede plana, para que Israel pase tranquilamente, guiado por la gloria de Dios.e	7 e 5.7 Is 40.4-5; Lc 3.4-6.
8 Los bosques y todos los árboles aromáticos darán sombra a Israel por orden de Dios,
9 porque él guiará a Israel con alegría a la luz de su gloria, y le mostrará su amor y su justicia. V. CARTA DE JEREMÍASa (6) Esta es una copia de la carta enviada por Jeremías a los israelitas que el rey de Babilonia iba a llevarse cautivos a Babilonia, en la que les comunicaba un mensaje recibido de Dios.b	9 a 6 Introd. Véase Introducción. b 6 Introd. La carta se presenta como enviada por Jeremías a los israelitas que iban desterrados a Babilonia (cf. 2 R 24.10-17; Jer 29.1). Toda ella está destinada a prevenir a los israelitas contra la infidelidad a su religión, y pone en ridículo la idolatría.
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