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Llamamiento de Gedeón
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1 Los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y Jehová los entregó en manos de Madián por siete años.a
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1 a 6.1 Véase la Introducción a Jueces; cf. Jue 2.11-15. Madián: Véase Ex 2.15 n.
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2 Como la mano de Madián los oprimía cada vez más, los hijos de Israel, por temor a los madianitas, se hicieron cuevas en los montes, cavernas y lugares fortificados.
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3 Pues sucedía que cuando Israel tenía algo sembrado, subían los madianitas y amalecitasb y los hijos del orientec contra ellos; subían y los atacaban.
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3 b 6.3 Amalecitas: Véase Ex 17.8 nota g.
c 6.3 Los hijos del oriente: grupo nómada no muy bien definido, que se desplazaba probablemente por Transjordania y por el desierto de Siria. Cf. Gn 29.1; Ez 25.4,10.
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4 Acampaban frente a ellos y destruían los frutos de la tierra, hasta llegar a Gaza.d No dejaban qué comer en Israel, ni ovejas ni bueyes ni asnos.
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4 d 6.4 Gaza: Véase Jos 11.22 nota n.
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5 Con sus tiendas y sus ganados, subían como una inmensa nube de langostas.e Ellos y sus camellos eran innumerables, y venían a la tierra para devastarla.
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5 e 6.5 Como una inmensa nube de langostas: Jl 1.1--2.11; cf. Jer 46.23; Am 7.1-2.
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6 De este modo se empobrecía Israel en gran manera por causa de Madián. Y los hijos de Israel clamaron a Jehová.
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7 Cuando los hijos de Israel clamaron a Jehová a causa de los madianitas,f
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7 f 6.7 Jue 3.9.
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8 Jehová les envió un profeta, el cual les dijo:
«Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: “Yo os hice salir de Egipto y os saqué de la casa de servidumbre.
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9 Os libré de manos de los egipcios y de manos de todos los que os afligieron, a los cuales eché de delante de vosotros, y os di su tierra.
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10 También os dije: ‘Yo soy Jehová, vuestro Dios: No temáis a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis’. Sin embargo, no habéis obedecido a mi voz”».g
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10 g 6.8-10 Este profeta anónimo contrapone la infidelidad de Israel a los grandes beneficios otorgados por el Señor a su pueblo elegido. Tal contraposición es frecuente en la predicación profética (cf. Is 1.2-3; 5.1-7; Os 11.1-5; Am 2.6--3.2) y, en general, en el AT (cf. Jue 2.2--3.12; 10.11-14; 1 S 2.27-36; 10.18-19). Véanse también Sal 78 nota a; 106 nota a.
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11 Entonces vino el ángel de Jehováh y se sentó debajo de la encina que está en Ofra,i la cual era de Joás abiezerita. Gedeón,j su hijo, estaba sacudiendo el trigok en el lagar, para esconderlo de los madianitas,
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11 h 6.11 El ángel de Jehová: Véase Gn 16.7 nota c.
i 6.11 Ofra de Abiezer se encontraba en territorio de Manasés (véase Jos 16.4 n.) y era distinta, por lo tanto, de la Ofra de Benjamín (cf. Jos 18.23).
j 6.11 Heb. 11.32.
k 6.11 Sacudiendo el trigo: Véase Mt 3.12 n.
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12 cuando se le apareció el ángel de Jehová y le dijo:l
--Jehová está contigo, hombre esforzado y valiente.m
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12 l 6.12 El siguiente relato puede compararse, por una parte, con los de la vocación de Moisés (Ex 3) y de Jeremías (Jer 1), y, por otra, con los de algunas manifestaciones del Señor a los patriarcas (Gn 18.1-15; 28.10-22; cf. también Gn 16.7-14; 21.14-19).
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13 Gedeón le respondió:
--Ah, señor mío, si Jehová está con nosotros, ¿por qué nos ha sobrevenido todo esto? ¿Dónde están todas esas maravillas que nuestros padres nos han contado, diciendo: “¿No nos sacó Jehová de Egipto?”. Y ahora Jehová nos ha desamparado y nos ha entregado en manos de los madianitas.
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14 Mirándolo Jehová, le dijo:
--Ve con esta tu fuerza y salvarás a Israel de manos de los madianitas. ¿No te envío yo?
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15 Gedeón le respondió de nuevo:
--Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo soy el menor en la casa de mi padre.n
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15 n 6.15 Como Moisés (Ex 3.11), Saúl (1 S 9.21) y Jeremías (Jer 1.6), Gedeón pone excusas para no aceptar una misión cuyo cumplimiento le parece demasiado difícil. Pero Dios no se guía por criterios humanos y elige casi siempre, para la realización de sus designios, a los que el mundo considera débiles y de poca importancia (1 Co 1.25-31). Cf. Gn 25.23; 1 S 10.17-24; 16.1-13; Ro 9.10-13.
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16 Jehová le dijo:
--Ciertamente yo estaré contigo,ñ y tú derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.
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16 ñ 6.16 Yo estaré contigo: Gn 26.24; 28.15; Ex 3.12; Jos 1.9; Is 41.10.
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17 Él respondió:
--Yo te ruego que si he hallado gracia delante de ti, me des señalo de que has hablado conmigo.
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17 o 6.17 Gedeón pide una señal, es decir, un milagro o un hecho extraordinario que le haga saber con seguridad que es realmente Dios el que lo envía. Cf. 2 R 20.8-11. Véanse Is 7.11 nota m. y Jn 2.11 n.
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18 Te ruego que no te vayas de aquí hasta que vuelva a ti y saque mi ofrenda y la ponga delante de ti.
Jehová le contestó:
--Yo esperaré hasta que vuelvas.
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19 Gedeón se fue, preparó un cabrito y panes sin levadura de un efa de harina, puso la carne en un canastillo y el caldo en una olla y, sacándolo se lo presentó debajo de aquella encina.
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20 Entonces el ángel de Dios le dijo:
--Toma la carne y los panes sin levadura, ponlos sobre esta peña y vierte el caldo.
Él lo hizo así.
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21 Extendiendo el ángel de Jehová el cayado que tenía en su mano, tocó con la punta la carne y los panes sin levadura, y subió fuego de la peña, el cual consumió la carne y los panes sin levadura. Luego el ángel de Jehová desapareció de su vista.
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22 Al ver Gedeón que era el ángel de Jehová, dijo:
--Ah, Señor Jehová, he visto al ángel de Jehová cara a cara.p
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22 p 6.22 He visto al ángel de Jehová cara a cara: Véase Ex 3.6 nota f.
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23 Pero Jehová le dijo:
--La paz sea contigo. No tengas temor, no morirás.
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24 Gedeón edificó allí altar a Jehová y lo llamó Jehová-salom.q Este altar permanece hasta hoy en Ofra de los abiezeritas.
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24 q 6.24 Cf. Gn 33.20; 35.7; cf. también Ex 17.15-16; Jos 22.34. La paz sea contigo: El término hebreo shalom tiene en el AT un significado muy amplio, que incluye los aspectos de paz, seguridad, concordia, prosperidad, bienestar y vida vivida en plenitud. Véase Lm 3.17 n.
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25 Aconteció que esa misma noche le dijo Jehová:
«Toma un toro del hato de tu padre, el segundo toro, el de siete años, y derriba el altar de Baalr que tiene tu padre; corta también la imagen de Asera que se halla junto a él
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25 r 6.25 Joás, el padre de Gedeón, era probablemente el guardián del templo donde se encontraba el altar erigido en honor del dios cananeo Baal. Véase Jue 2.13 n.
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26 y edifica altar a Jehová, tu Dios, en la cumbre de este peñasco, en lugar conveniente. Toma después aquel segundo toro y sacrifícalo en holocausto con la madera de la imagen de Asera que habrás cortado».
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27 Entonces Gedeón tomó diez hombres de entre sus siervos e hizo como Jehová le dijo. Pero temiendo hacerlo de día, a causa de la familia de su padre y de los hombres de la ciudad, lo hizo de noche.
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28 Por la mañana, cuando los de la ciudad se levantaron, el altar de Baal estaba derribado, y había sido cortada la imagen de Asera que se hallaba junto a él, y ofrecido aquel toro segundo en holocausto sobre el altar edificado.
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29 Y unos a otros se preguntaban:
--¿Quién ha hecho esto?
Buscando e inquiriendo, les dijeron:
--Gedeón hijo de Joás lo ha hecho.
Entonces los hombres de la ciudad dijeron a Joás:
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30 --Saca a tu hijo, para que muera, porque ha derribado el altar de Baal y ha cortado la imagen de Asera que se hallaba junto a él.
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31 Pero Joás respondió a todos los que estaban junto a él:
--¿Lucharéis vosotros por Baal? ¿Defenderéis su causa? Cualquiera que contienda por él, que muera esta mañana. Si es un dios, que luche por sí mismos con quien derribó su altar.
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31 s 6.31 Cf. 1 R 18.25-29.
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32 Aquel día Gedeón fue llamado Jerobaal,t esto es: “Luche Baal contra él”, por cuanto derribó su altar.
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32 t 6.32 En hebreo, el nombre Jerobaal y las palabras que significan luche Baal contra él se asemejan en el sonido.
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33 Pero todos los madianitas y amalecitas y los del oriente se juntaron a una, y cruzando el Jordán acamparon en el valle de Jezreel.
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34 Entonces el espíritu de Jehová vino sobreu Gedeón, y cuando este tocó el cuerno, los abiezeritas se reunieron con él.
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34 u 6.34 El espíritu de Jehová vino sobre: Acerca de esta expresión, véase Jue 3.10 n.
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35 Envió mensajeros por todo Manasés, y también ellos se le unieron; asimismo envió mensajeros a Aser, a Zabulón y a Neftalí, los cuales salieron a su encuentro.
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36 Gedeón dijo a Dios:
«Si has de salvar a Israel por mi mano, como has dicho,
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37 he aquí que yo pondré un vellón de lana en la era; si el rocío está sobre el vellón solamente, y queda seca toda la otra tierra, entonces entenderé que salvarás a Israel por mi mano, como lo has dicho».
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38 Y así aconteció, pues cuando se levantó de mañana, exprimió el vellón para sacarle el rocío, y llenó con él un tazón de agua.
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39 Pero Gedeón dijo a Dios:
«No se encienda tu ira contra mí si hablo de nuevo: probaré ahora otra vez con el vellón. Te ruego que solamente el vellón quede seco, y el rocío caiga sobre la tierra».v
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39 v 6.39 Cf. Gn 18.30,32.
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40 Aquella noche lo hizo Dios así; solo el vellón quedó seco, y en toda la tierra hubo rocío.
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