Introducción (1.1-8)
La revelación de Jesucristo
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1 Esta es la revelacióna que Dios hizo a Jesucristo, para que él mostrara a sus siervos lo que pronto ha de suceder.b Jesucristo lo ha dado a conocer enviando su ángel a su siervo Juan,
2 y Juan ha dicho la verdad de todo cuanto vio y es testigoc del mensaje de Dios confirmado por Jesucristo.d
3 Dichoso el que lee, y dichosos los que escuchan la lectura de este mensaje proféticoe y hacen caso de lo que aquí está escrito,f porque ya se acerca el tiempo.g
Juan escribe a las siete iglesias
4 Juan a las siete iglesias de la provincia de Asia.h Recibid gracia y pazi de parte del que es y era y ha de venir,j y de parte de los siete espíritusk que están delante de su trono,
5 y también de parte de Jesucristo, testigo fiel,l que fue el primero en resucitarm y tiene autoridad sobre los reyes de la tierra.n Cristo nos ama y nos ha librado de nuestros pecados derramando su sangre,ñ
6 y ha hecho de nosotros un reino; nos ha hecho sacerdotes al servicio de su Dios y Padre.o ¡Que la gloria y el poder sean suyos para siempre! Amén.p
7 ¡Cristo viene en las nubes!
Todos le verán,
incluso los que le traspasaron;
y todos los pueblos del mundo
harán duelo y llorarán por él.q
Sí, amén.
8 “Yo soy el alfa y la omega”,r dice el Señor, el Dios todopoderoso, el que es y era y ha de venir.s
I. LOS MENSAJES A LAS SIETE IGLESIAS (1.9–3.22)
Visión de Cristo glorioso
9 Yo, Juan, soy vuestro hermano, y por mi unión con Jesús tengo parte con vosotros en el reino de Dios, en los sufrimientos y en la fortaleza para soportarlos. Por haber anunciado el mensaje de Dios confirmado por Jesús,t me encontraba en la isla de Patmos.u
10 Y sucedió que el día del Señorv quedé bajo el poder del Espíritu,w y oí detrás de mí una fuerte voz, como un toque de trompeta,x
11 que me decía: “Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias de la provincia de Asia: Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardes, Filadelfia y Laodicea.”y
12 Me volví para ver de quién era la voz que me hablaba; y al hacerlo vi siete candelabros de oro,z
13 y en medio de los candelabros vi a uno semejante a un hijo de hombre,a vestido con una túnica que le llegaba hasta los pies y con un cinturón de oro a la altura del pecho.
14 Sus cabellos eran blancos como la lana,b o como la nieve, y sus ojos parecían llamas de fuego.
15 Sus pies brillaban como bronce bruñido, fundido en un horno, y su voz era tan fuerte como el ruido de una cascada.c d
16 En su mano derecha tenía siete estrellase y de su boca salía una espada aguda de dos filos.f Su rostro era como el sol cuando brilla en todo su esplendor.
17 Al verle caí como muerto a sus pies. Pero él, poniendo su mano derecha sobre mí,g me dijo: “No tengas miedo: yo soy el primero y el último,h
18 y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo para siempre. Yo tengo las llavesi del reino de la muerte.j
19 Escribe lo que has visto: lo que ahora hay y lo que va a haber después.
20 Este es el secreto de las siete estrellas que has visto en mi mano derecha, y de los siete candelabros de oro: las siete estrellas representan a los ángelesk de las siete iglesias, y los siete candelabros representan a las siete iglesias.
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