22
1 a 22.1 Respecto a las fiestas de la Pascua y de los Panes sin levadura, véanse Mc 14.1 n. y Concordancia temática.
2 b 22.2 Cf. Lc 19.47-48; 20.19.
3 c 22.3 Jn 13.2-4,27. Satanás: el diablo ( Mc 1.13 nota o); cf. la oposición a Jesús en la prueba del desierto ( Lc 4.13 n.).
7 d 22.7 Al llegar la Pascua, se sacrificaba el cordero que se comía en la cena conmemorativa de la salida de los israelitas de Egipto ( Ex 12.1-28).
10 e 22.10-11 Dado que las mujeres eran las que acostumbraban llevar agua en cántaros, el hombre del cántaro puede haber servido como contraseña para mantener en secreto los planes para la cena.
12 f 22.12 Aposento alto... preparadla allí: Véase Mc 14.15 n.
13 g 22.13 Cf. Dt 16.5-8.
14 h 22.14 La hora: la de la cena pascual, después de la puesta del sol.
i 22.14 Se sentó... apóstoles: véase Mt 26.20 n.
16 j 22.16 Sobre la imagen del banquete, véase Mt 8.11 nota i; cf. Lc 13.29.
17 k 22.17 Solo Lucas menciona una copa aquí, antes del pan (v. 19); más adelante (v. 20) menciona otra copa después de la cena. En realidad, parece que en la cena de Pascua se tomaban entonces al menos tres copas de vino.
19 l 22.19-20 Además de los pasajes paralelos, cf. Jn 6.51-58.
20 m 22.20 El nuevo pacto: Jer 31.31-34. En mi sangre: El primer pacto o alianza que Dios hizo con Israel se confirmó con la sangre de animales sacrificados ( Ex 24.6-8; Heb 9.18-22). Cf. Heb 10.29; 13.20.
21 n 22.21 Sal 41.9. Los otros evangelios dejan abierta la posibilidad de que Judas no haya estado presente cuando Jesús instituyó la Cena; según Lucas, en cambio, da a entender que sí estaba.
22 ñ 22.22 Según lo que está determinado: es decir, el camino de la cruz que Dios le ha señalado.
25 p 22.25 Bienhechores: Los griegos daban este título honorífico a los dioses, a los reyes y a otros personajes importantes.
26 q 22.25-26 Mt 20.25-27; 23.11; Mc 9.35; 10.42-44.
31 t 22.31 Zarandearos: esto es, sacudir o cribar; expresión que implica poner a prueba la fidelidad (cf. Am 9.9).
32 u 22.32 Tú, una vez vuelto: expresión que puede entenderse como volverse, sea a Jesús, sea a Dios (esto es, arrepentirse después de negar a Jesús).
34 v 22.34 Respecto al canto del gallo, véase Mt 26.75 n.
36 x 22.36 Traer bolsa, alforja y espada son expresiones que indican la actitud del que va a emprender un viaje peligroso, símbolo de la prueba que va a comenzar para Jesús y sus discípulos.
38 z 22.38 Basta: es decir, basta ya de hablar. Los discípulos no habían entendido el sentido figurado de las palabras que Jesús acababa de dirigirles.
40 a 22.40 Tentación (aquí y en el v. 46): También puede traducirse como prueba (véase Mt 6.13 nota p); cf. las pruebas mencionadas en 22.28-36 y la dura prueba narrada a partir del v. 47.
42 c 22.42 Esta copa: de amargo sufrimiento. La copa es figura de sufrimiento o prueba; véase Mt 26.39 n.
44 d 22.43-44 Los v. 43-44 no aparecen en diversos ms.
48 e 22.47-48 Respecto al beso, véase Mt 26.48-49 n.
g 22.53 La potestad de las tinieblas: alusión a Satanás y a las fuerzas del mal; cf. Hch 26.18; Col 1.13.
61 h 22.61 Cf. v. 34.
63 i 22.63-65 Jn 18.22-23.
66 j 22.66 Al Concilio: el Sanedrín o consejo supremo de los judíos; véase Concordancia temática. Véase también Mt 26.57 n.
69 k 22.69 Sal 110.1; Hch 7.56. La diestra: o la derecha, el lugar de honor.
70 l 22.70 La respuesta de Jesús puede entenderse como es así como vosotros decís, o bien, vosotros sois quienes lo decís.
71 m 22.70-71 Cf. Jn 10.33.
23
1 a 23.1 Pilato: Véase Mt 27.2 n. Como prefecto o gobernador romano, Pilato juzgaba los casos de índole no religiosa.
2 b 23.2 Lc 20.20-26; los testigos dan una versión falsa.
c 23.2 El Cristo, un Rey: Véase Cristo en la Concordancia temática. El que Jesús hubiera pretendido ser rey en sentido político habría constituido un acto de sedición contra Roma. Este cap. demuestra que Jesús fue inocente de los tres cargos lanzados contra él (cf. v. 4,14,22).
3 d 23.3 Tú lo dices: respuesta enigmática, que puede entenderse como es así, como tú has dicho, o bien, eres tú quien lo dice. Jesús no era Rey de los judíos en sentido político. Véanse 22.70 n. y Mt 27.11 n.
6 e 23.6 Cuando oyó decir: otros ms. dicen: oyéndolo.
7 f 23.7 Herodes Antipas ( Lc 3.1 nota d) gobernaba en Galilea, la región donde Jesús había vivido y desarrollado la mayor parte de su actividad.
8 g 23.8 Lc 9.9. En Hch 4.26-28 se interpreta este episodio como el cumplimiento del Sal 2.1-2.
11 i 23.11 Cf. Mc 15.17-20.
17 j 23.17 El v. 17 no aparece en diversos ms.
18 k 23.18 No hay indicaciones de que esta multitud fuera la misma que había aclamado a Jesús anteriormente ( Lc 19.37); véase Mt 27.20 n.
21 l 23.21 Véase Crucifixión, cruz en la Concordancia temática.
23 m 23.23 En diversos ms. no aparece: y de los principales sacerdotes.
26 n 23.26 En cuanto al espectáculo que hacían de los condenados a muerte, y en cuanto a Simón, véanse las notas sobre Mt 27.31 y Mc 15.21.
28 ñ 23.28 Expresión semítica que equivale a más que llorar por mí, llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos.
31 q 23.31 Probable alusión a las calamidades que iban a venir sobre Jerusalén. Véase Lc 21.6 n.
33 r 23.33 La Calavera: Véase Gólgota en la Concordancia temática.
t 23.34 Alusión al Sal 22.18.
36 u 23.36 Cf. Sal 22.7-8; 69.21. Vinagre: o vino agrio. Véase Mt 27.48 n.
43 v 23.43 Paraíso: palabra aplicada primeramente al jardín del Edén ( Gn 2.8--3.24) y después al lugar de felicidad donde los justos esperan el juicio final y la resurrección.
44 w 23.44 Véase Mt 27.45 n.
45 x 23.45 El velo: Cf. Ex 26.31-33. Se refiere probablemente al velo o cortina del Templo que separaba el Lugar santo del Lugar santísimo (véase Mt 27.51 n.).
48 z 23.48 Golpeándose el pecho: señal de angustia y quizá de remordimiento.
49 a 23.49 Las mujeres: Lc 8.1-3.
53 c 23.53 Un sepulcro abierto en una peña: Véase Mt 27.60 n.
54 d 23.54 Día de la preparación: el viernes, día en que los judíos se preparaban para celebrar el sábado.
55 e 23.55 Cf. v. 49.
56 f 23.56 Especias... y ungüentos: utilizados para embalsamar el cuerpo y completar así el ritual de la sepultura.
g 23.56 Descansaron el sábado, conforme al mandamiento: Ex 20.10; Dt 5.14. Como era tarde, las mujeres tenían que esperar a que pasara el sábado, día de reposo, antes de poder hacer cualquier trabajo ( Mc 16.1).
24
1 a 24.1 El primer día de la semana: Jn 20.19; Hch 20.7 nota g.
4 b 24.4 Con vestiduras resplandecientes: Jn 20.12. Véase Mc 16.5 n.
7 d 24.6-7 Mt 16.21; 17.22-23; 20.18-19; Mc 8.31; 9.31; 10.33-34; Lc 9.22; 18.31-33.
12 f 24.12 Cf. Jn 20.3,5-6, y véase Jn 20.6-7 n.
13 g 24.13 Dos de ellos: es decir, de los discípulos o seguidores de Jesús que no eran del grupo de los once apóstoles (v. 33).
16 h 24.16 Cf. Jn 20.14; 21.4.
18 i 24.18 Cleofas: nombre masculino griego; probablemente una persona distinta de la mencionada en Jn 19.25.
26 l 24.26 Cf. lo dicho por Jesús en Lc 9.22; 17.25.
27 m 24.27 Las Escrituras comprendían principalmente los libros de Moisés y de los Profetas. (Véanse Mt 5.17 nota x; Lc 24.44 nota s).
31 n 24.30-31 La expresión «partir el pan» fue específicamente aplicada por la iglesia primitiva a la Cena del Señor ( Hch 2.42; 20.7; 1 Co 10.16), por lo que su uso aquí y en el v. 35 puede ser una alusión a ella.
34 ñ 24.34 Esta aparición a Simón Pedro no se menciona en los otros evangelios, pero Pablo se refiere a ella en 1 Co 15.5.
36 o 24.36 ¡Paz a vosotros!: saludo tradicional judío, que en estas circunstancias adquiere un sentido más profundo; véase Jn 14.27 n.
39 p 24.39 Mis manos y mis pies: En ellos se veían las marcas de la crucifixión; cf. también Jn 20.20,24-27. Palpad y ved: Cf. 1 Jn 1.1.
44 r 24.44 Era necesario... cumpliera: Se recalca, al final del evangelio, el tema introducido en Lc 4.21; cf. también Lc 18.31; 22.37.
s 24.44 El libro de los Salmos formaba la primera parte, y la más extensa, de la tercera división de las Escrituras (véase Introducción al NT).
47 u 24.47 Los v. 44-47 anticipan en cierto modo la proclamación que deberán hacer los apóstoles (cf. Hch 2.14-39; 3.17-26; 8.35; 13.16-41; 26.20).
49 w 24.49 La promesa de mi Padre: es decir, el Espíritu Santo ( Hch 1.4; 2.33; cf. Jn 14.16-17,26; 16.7; 20.21-22).
x 24.47-49 Estos v. preparan al lector para la continuación del relato, que el mismo autor presenta al comienzo del libro de los Hechos (cf. especialmente Hch 1.1-11; 2.1-4).
50 y 24.50-53 La ascensión de Jesús se relata en forma más amplia en Hch 1.3-11.
z 24.50 Betania: aldea cercana a Jerusalén ( Mt 21.17 n.).
53 a 24.53 En diversos ms. no aparece: Amén.
|